Por Armnando Martínez Fuerte | Biblioteca UAM
A toda la comunidad universitaria, iniciamos una etapa en este espacio, el cual tratará de informar a toda la comunidad sobre el servicio
que ofrecemos en la Universidad Americana a través de su biblioteca. Será un pequeño artículo donde comunicaremos las últimas novedades en todos
los aspectos relacionados estos con nuestra área, la biblioteca.
La manera en que saldrá es la siguiente; cada quincena expondremos
novedades o algún o comentaremos algún libro de cada carrera, iniciando por la carrera
de Administración. Y así sucesivamente en orden alfabeto. En este primer momento hablaremos acerca de lo que es la biblioteca, como
una pequeña introducción, y que dará la pauta abrir este espacio.
En la red diveros sitios ofrecen una definición de la palabra biblioteca, el término proviene del latín bibliothēca, que a su vez deriva del griego βιβλιοθήκη ('bibliothēke'), la
cual está compuesta por los vocablos βιβλίον ('biblíon'
«libro») y θήκη ('théke' «armario, caja»). Es decir,
hacía referencia al lugar donde los libros eran guardados.
Aspecto de la biblioteca de la UAM. |
Según la norma UNE
50113-1:1992 sobre conceptos básicos de información y documentación, el término
biblioteca puede definirse en dos sentidos: el primero, como cualquier colección
organizada de libros y publicaciones en serie impresos u otros tipos de
documentos gráficos o audiovisuales disponibles para el préstamo o consulta.
En segundo término, puede definirse como un organismo, o parte de él, cuya principal función consiste en construir bibliotecas, mantenerlas, actualizarlas y facilitar el uso de los documentos que precisen los usuarios para satisfacer sus necesidades de información, investigación, educativas o de esparcimiento, contando para ello con un personal especializado. En todas las definiciones sin embargo, distinguimos tres elementos fundamentales: Colección, organización y uso.
En segundo término, puede definirse como un organismo, o parte de él, cuya principal función consiste en construir bibliotecas, mantenerlas, actualizarlas y facilitar el uso de los documentos que precisen los usuarios para satisfacer sus necesidades de información, investigación, educativas o de esparcimiento, contando para ello con un personal especializado. En todas las definiciones sin embargo, distinguimos tres elementos fundamentales: Colección, organización y uso.
La biblioteca en la edad Antigua
Las bibliotecas se remontan
a etapas de la humanidad antiquísimas desde las ciudadelas de la antigua
Mesopotamia, esta ciudad es considerada unas de las más antiguas civilizaciones
y que da origen a una sociedad organizada, por ende podríamos decir que no es
la guerra un mecanismo de organización humano colectivo, sino el conocimiento
la Gnosis en su terminología griega.
Otra de las civilizaciones
que se llenaron de acervo cultural fue la egipcia ahí existieron dos clases de
instituciones, Casas de los libros y Casas de la vida. La escritura en sus orígenes y los especialistas filólogos nos
dirán fue la etapa que sustituyó la tradición oral. En sus inicios estarán las
jeroglífica, hierática o demótica. Y se almacenaban en rollos de papiro.
La siguiente etapa de las
bibliotecas fue en la cultura helénica, que por ser cuna del pensamiento
filosófico occidental es Grecia se considera pilar y origen de un pensamiento
ya estructural.
He ahí que la biblioteca de
Alejandría una de las maravillas del mundo antiguo esta precisamente en
ciudades griegas. Roma, hija putativa de la
cultura griega, se empleó el mismo material de contenido de información los
papiros. Y es aquí donde tiene
origen la primera biblioteca pública de la que hay constancia. Nombraremos
algunas, de las grandes bibliotecas, la Octaviana, la Palatina, creadas por el Cesar
Augusto. En estas bibliotecas se acostumbraba dividir en libros griegos y
romanos.
Con el nacimiento del
pensamiento cristiano, nacerán también nuevas formas de narrar y redactar la
vida de estas comunidades nacientes su fe y su vivencia. Surge aquí la etapa de
patrisca y con ellos muchos escritos que serán llamados posteriormente libros
cristianos.
En la próxima entrega hablaremos de la biblioteca en la edad Media.
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